La temporada alta no perdona. España se ha olvidado de las crisis y de los problemas producidos en los últimos años para recuperar su ocupación hotelera a pleno rendimiento. Esto también se refleja en los precios, notándose cómo la llegada de la Semana Santa ha causado estragos en los costes de las habitaciones de hotel.
Datos suministrados recientemente indican que los hoteles de las dos grandes ciudades del país: Madrid y Barcelona, han sufrido un aumento dramático en sus precios. Las habitaciones de la capital han pasado a ser un 43% más caras con motivo de la Semana Santa, mientras que en Barcelona el porcentaje se eleva hasta el 49%.
Estas cifras son realmente negativas para quienes estuvieran pensando en salir de viaje, aunque la buena noticia es que incluso con esos porcentajes, las habitaciones de Madrid y Barcelona no son las más caras de España. Hay lugares en los que conseguir alojamiento en esta fecha del año es todavía más difícil, algo que ocurre específicamente en Málaga y Sevilla.
A la vista de la tradición que tienen estas dos ciudades con la Semana Santa, no es algo que sorprenda. No obstante, no resulta menos negativo ver lo que está pasando con los precios y que la industria no pone ningún tipo de control al escalamiento de los precios.
Eso sí, para los hoteles y los profesionales de la industria turística, son buenas noticias. Se ha comentado que no se registraba una temporada de Semana Santa como la de 2023 desde hace mucho tiempo. Los ciudadanos vuelven a viajar y lo hacen con la intención de hacer borrón y cuenta para volver a tener buenos recuerdos fuera de su ciudad de residencia.
Es más que probable que la Semana Santa de 2024 sea más relajada, pero en este año, en el que se concentran las ganas de salir de viaje que tiene todo el mundo, la industria está haciendo el agosto.